Energía vital, que

Mi casa es mi fortaleza. Pero la fortaleza consiste no solo en las paredes y ventanas, sino que esta es la vida hogareña, el lado nativo, la paz familiar, la comodidad. El tiempo está cambiando. Vivimos en el siglo XXI. Al ir en la pierna con moda, la gente aprendió a construir viviendas muy cómodas y cómodas. La nueva casa debe estar llena de alegría y energía vital, que estará cerca de una persona.